Como cierre de las actividades formativas desarrolladas durante todo el año con docentes, mentores, directores y subdirectores, el Consejo de Formación en Educación (CFE) organizó un ateneo durante los días 12 y 13 de diciembre, un espacio de intercambio de experiencias que testimonia el recorrido que cada centro e instituto de Formación Docente ha transitado en este proceso de transformación.
En la actividad participaron: la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), la Dra. Virginia Cáceres, la consejera Dora Graziano, autoridades del CFE, el presidente, Prof. Víctor PIzzichillo, las consejeras, Mtra. Prof. María del Carmen dos Santos Farías, Lic. Patricia Revello, Mtra. Prof. Rita Cabrera, Yamila Araujo, y la secretaria general, Esc. Rosana García Paz. También asistieron representantes de los diferentes subsistemas y oficinas de Planeamiento Educativo, la Inspección Técnica de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP), referentes de Ceibal, de la Oficina de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) sede Montevideo y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Un día muy especial
En la apertura, el presidente del CFE, Prof. Víctor Pizzichillo, expresó que “el día de hoy es un día muy especial para todos, para la ANEP, porque es el día en el cual recogemos el fruto del esfuerzo, del trabajo, de la dedicación, del profesionalismo de la comunidad educativa que conforma el Consejo de Formación en Educación”.
El jerarca agradeció “a los especialistas que nos acompañan hoy y que nos han acompañado durante todo el proceso de formación, a todos los funcionarios de los centros y el Consejo, que han permitido que estas instancias y sobre todo el desarrollo de los cursos en cada centro se lleven adelante. Porque en definitiva nuestra razón de ser son los estudiantes”.
Luego, reiteró “es un día de fiesta, un día de valoración, un día de cosecha”. Pizzichillo apreció el trayecto recorrido en conjunto en la construcción de los nuevos planes de estudio. Recalcó a su vez, que se trata de un proceso, en el cual se ha trabajado en los últimos diez años para poder concretarlos. “Los planes de estudios nuestros son el resultado de diez años de trabajo en formación docente, porque son procesos que se van dando, que se van desarrollando y que permiten en un determinado momento la concreción de los mismos, porque hacía mucho tiempo que se veía en la Administración la necesidad de adecuar los diseños curriculares de la formación de los docentes a los tiempos que nos toca vivir, porque los diseños son el resultado de los tiempos que viven las sociedades”, insistió el presidente.
Profundizó “la educación es un camino de transmisión y es un camino de creación, es un camino de conservación y es un camino de transformación. Por eso siempre vivimos en esa tensión entre conservar y transformar, transmitir y crear”.
Pizzichillo, también se refirió al tiempo que nos toca vivir, a esta nueva realidad que según expresó “implicaba también que los planes de formación respondieran a las nuevas formas de enseñar y de aprender, que tenemos fruto del cambio social, fruto de las nuevas realidades, fruto del avance tecnológico, fruto de la inteligencia artificial, de todo eso nuevo que nos interpela cada día, y cada día nos hace sentir más inseguros”.
Al respecto, explicó que “no basta con los contenidos. Acá lo que necesitamos es desarrollar competencias a través de los contenidos que nos posicionen en el proceso formativo”.
Seguidamente, el presidente del CFE citó la situación de “los jóvenes que migran, cambian, trabajan a distancia, trabajan para otro país”. Esto requiere del sistema una apertura a trabajar en ello, según el jerarca. A la vez, insistió en que el sistema educativo tiene que adaptarse, tiene que cambiar. “Los planes de formación son algo dinámico. Aquel que crea que el Plan 2023 llegó para quedarse y ser así por 20 años, como lo han sido los planes anteriores, está equivocado porque el desarrollo curricular es algo permanente cambiante, que responde a las necesidades formativas de los docentes”.
Mayor tiempo de formación
Por ello, PIzzichillo defendió a continuación la necesidad de un mayor tiempo de formación. “En el proceso formativo tenemos que fortalecer el capital cultural, porque la función del docente es transmitir la cultura”. Además, explicó la importancia de un mayor tiempo de formación para fortalecer la enseñanza de una segunda lengua. “Nadie puede ser profesional de la educación si no tiene un conocimiento básico de una segunda lengua, por lo que significa acceder al conocimiento por la oportunidad que da, por las percepciones del mundo que se tienen. Los docentes tenemos que tener una percepción de apertura al mundo para poder entenderlo”.
También arguyó sobre la trascendencia de fortalecer la enseñanza de la lengua materna. “Si un aspirante a docente no domina su lengua materna desde la oralidad y desde la escritura seguramente su proceso de formación no va a ser el mejor”, manifestó.
Asimismo, evidenció la dimensión de fortalecer el trabajo interdisciplinario. “No quiere decir que esto no se hiciera antes, pero sí necesitamos potenciarlo y fortalecerlo y que sea un trabajo natural en las comunidades educativas y no una excepcionalidad. Porque el mundo requiere de personas que sepan trabajar en equipo, que sepan colaborar, que sepan compartir”, insistió.
Proyecciones y desafíos
En lo que refiere a las proyecciones, el presidente dijo que “la administración tiene cinco grandes desafíos para el 2024, porque no, no va a ser un año de impasse ni de tránsito el 2024, porque en el 2024 necesitamos desarrollar lo que es la didáctica de la educación superior, nuestro campo específico en la formación docente, nuestro campo específico de producción de conocimiento y de investigación, el campo específico que nos da la identidad y que debemos potenciarlo.
A este respecto, detalló “necesitamos una profundización en la formación para los formadores en todos los campos del conocimiento. Pero particularmente en la didáctica y fundamentalmente en la didáctica de la lengua y de la matemática”.
Por otra parte, estimó que el Consejo seguramente deba abordar en el próximo año las cuestiones organizativas de las estructuras académicas. “Porque Formación Docente siempre ha tenido estructura académica desde que se fundaron los Institutos Normales. No es una creación del tiempo moderno. La estructura académica era una estructura distinta y la tenían los Institutos de Formación Docente, y la tenía el IPA cuando Grompone lo crea y lo constituye. Y pensaba en estructura académica el Plan 86, y lo pensaba el Plan 92, cuando crea el primer Departamento Académico en Formación Docente, que era el de Ciencias de la Educación”, afirmó Pizzichillo.
Al cierre de su alocución, el presidente del CFE concluyó que “los desafíos son bastante importantes y estamos todos convocados desde nuestra responsabilidad institucional. Y cuando digo responsabilidad institucional, somos los 3.000 docentes y funcionarios que tiene el Consejo de Formación en Educación, a asumir estos desafíos, porque buscan el bien de todos y una mejor formación docente, que es el corazón del sistema educativo. Así que les agradecemos la presencia, el trabajo, la dedicación, el tiempo que vamos a compartir hoy, que seguramente va a ser muy fructífero”.
Reconocimiento
A continuación, la presidenta del Consejo Directivo Central (CODICEN) de la ANEP, la Dra. Virginia Cáceres Batalla, acordó con Pizzichillo en “la importancia que tiene esta jornada del día de hoy”. “Es importante por muchísimas de las razones que el presidente del Consejo dijo. Yo quiero destacar dos. Primero, en lo que tiene que ver con generar espacios en donde ustedes pueden compartir, se puede repensar, a partir de las estrategias y de las experiencias vividas en cada uno de los centros y por cada uno de los equipos, para poder proyectar a futuro cuáles son los cambios, cuáles son las mejoras a partir de sus propias experiencias. Y, en segundo lugar, porque a esta altura del año también y después de todo un proceso de implementación, de transformación, esto también es un reconocimiento al trabajo que ustedes han hecho durante todo este año en el territorio, que son, en definitiva, los que están llevando adelante esta transformación, acompañando a los docentes y asegurándose que haya buenas prácticas y que todo esto que en papel se pone sea transmitido en el territorio y llegue a las aulas”, valoró Cáceres.
La máxima referente de la ANEP, enunció ante el auditorio que este ateneo era un reconocimiento de parte de la ANEP y “una forma de agradecerles a todos ustedes el trabajo que están llevando adelante en cada uno de sus espacios para esta administración, que desde el inicio estuvo absolutamente convencida que para poder avanzar y generar un cambio real y efectivo en la educación de nuestro país, lo primero que había que hacer era empezar por transformar la educación y la formación de nuestros docentes”.
En coincidencia con Pizzichillo, Cáceres afirmó que “siempre se tuvo en mente que el camino a recorrer debía ser el de generar equipos fortalecidos, que tuvieran la capacidad de liderar procesos pedagógicos, que tuvieran la capacidad de adaptarse a un mundo que exige el cambio constante. Y ese ha sido el camino que ha llevado adelante el Consejo de Formación en Educación durante todo este año y que va a seguir llevando adelante en lo que queda”.
La presidenta, también se refirió al 2024, como “un año en donde los esfuerzos van a seguir apuntando a avanzar en la implementación de esta transformación, que ya no hay dudas, que no solamente es necesaria, sino que además es un proceso que no va a parar”.
Al cierre, Cáceres felicitó y agradeció a todos los docentes por el trabajo realizado y su compromiso.
Repaso del trayecto
Prosiguiendo la actividad, expuso la Prof. Laura Silva en representación de la Asesoría Académica.
“El desafío de la formación tenía tres grandes incógnitas o tres grandes mojones a los cuales dar respuesta. La formación tenía que ser contextualizada. La formación tenía que ser para los profesionales de la educación y tenía que ser con enfoque competencial”, explicó haciendo un repaso de las acciones realizadas.
En ese sentido, citó varios desafíos planteados: educar para quienes se forman hoy y para el futuro, quienes seguirán trabajando en 30 o 40 años; la transformación educativa teniendo en cuenta que los docentes que se forman hoy serán quienes van a aplicarla; atender las transformaciones locales y globales; contextualizar la formación a la identidad de la formación en educación; contextualizar la nueva propuesta curricular, que viene dada desde cimiento por el marco curricular de la formación de grado de los educadores; y contextualizar los territorios.
El marco curricular se planteaba en base a cinco desafíos, según la especialista. Esos desafíos partían de formar a los docentes con una visión sistémica de la formación, expresó Silva. El CFE pertenece a la ANEP, pero también a todo un sistema educativo nacional, por ello la necesidad de desarrollar alianzas estratégicas y de colaboración.
Otro aspecto que citó la experta fue la educación bimodal y su aceleración a partir de la pandemia. También se refirió a la educación inclusiva y la necesidad de “pensar en el aprendizaje de cada uno, y en la adaptación y promoción del cambio a los escenarios de desempeño profesional”.
Silva, destacó que, junto a los desafíos se plantearon funciones y características que retoman aportes de años anteriores. La investigación, la enseñanza y la extensión se potencian, pero de una manera distinta. “Nosotros formamos educadores cuya principal función será la docencia directa. No digo la única, pero sí la principal. Por lo tanto, la función de enseñanza es fundamental y lo que el plan apunta, es que la investigación y la extensión no se den en paralelo, sino que el aprendizaje se potencie desde metodologías de aprendizaje activo, sostenidas por procesos de investigación y de extensión”, describió.
Además, la asesora habló sobre la necesidad de un “plan crediticio que favorezca la navegabilidad, la semestralización. Favorecer la autonomía del estudiante para que pueda tomar decisiones no solo sobre un curso sino sobre su proyecto de vida”. En ese orden, se refirió a la importancia de una propuesta flexible para coadyuvar a lograr autonomía, navegabilidad y construcción del conocimiento.
Sobre el paradigma del aprendizaje permanente hizo hincapié en la necesidad de un diseño con enfoque competencial. “Teníamos que tener aportes teóricos articulados con los documentos curriculares y el contexto nacional”, expresó Silva y a continuación agradeció a los ponentes nacionales e internacionales, que acompañaron la propuesta, analizaron los marcos curriculares, y estudiaron para combinar y articular los aportes teóricos con los documentos curriculares que se iban aprobando.
Silva también resaltó la generación de equipos mentores y el desarrollo de tres liderazgos claves: un liderazgo distribuido, donde el rol de los directores fue fundamental; un liderazgo pedagógico, donde los mentores construyeron y mucho; y un liderazgo para el aprendizaje que, interactuando con los otros dos, era llevado al aula y a los centros por los docentes de primer año del plan”. Sobre este punto, recordó que para que el curso tuviera ahondamiento fue necesario redactarlo, aprobarlo, ganar espacio, generar espacios para la multi modalidad. Y en ese sentido, la docente hizo un especial reconocimiento al equipo técnico del Instituto de Perfeccionamiento y Estudios Superiores “Juan E. Pivel Devoto” (IPES), que siempre estuvo dispuesto, y a Semipresencial, que generó un aula virtual”. Silva también agradeció la articulación entre las diferentes oficinas del CFE que facilitaron la concreción de las instancias formativas a lo largo del año, y a “dos colaboradores fundamentales: la oficina de UNESCO Montevideo y la Fundación ReachingU.
La primera jornada cerró con una destacada mesa integrada por el Mag. Martín Rebour, la Dra. María Inés Vázquez, la Lic. Graciela Laureiro, la Dra. Graciela Fabeyro, el presidente del CFE, Prof. Víctor Pizzichillo Hermín, el consejero de la ANEP, Dr. Juan Gabito Zóboli, la Dra. Beatriz Macedo, la Mag. Nelly Leites y el Dr. Javier Valle desde España.
En la segunda jornada, durante la mañana del miércoles 13, los equipos de mentores, directores y subdirectores, se reunieron en proceso de evaluación de la formación “La acción pedagógica – didáctica en la formación de educadores con enfoque competencial”, y de construcción de aportes para las acciones del 2024. Luego, en la tarde los equipos presentaron las experiencias desarrolladas durante el año.
Al finalizar, los mentores recibieron de parte de las autoridades un presente en reconocimiento por su valiosa y continua labor.